No es el dinero, la fama, los honores, el sexo, el reconocimiento, el poder...
Al final de nuestros días llegaremos a la presencia del Eterno Padre, no lo olvidemos. En ese momento seremos cuestionados:
¿Cuánto amaste a tu familia, la realidad que te tocó vivir?
¿Cuánto amaste la cruz que te tocó cargar?
¿Cuánto amaste a aquellos que te hacían 'la vida imposible'?
¿Cuánto amaste a Dios con tu mente, corazón y voluntad, acciones, pasiones y sentimientos?
Pues bien, si el amor es el parámetro del cielo... uno solo es el Camino ¡Y ya sabemos cuál es!
Que tengas un excelente día.
Recuerda que amar muchas veces es difícil, mas no imposible.
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